Una exposición que se plantea como un fragmento de historia entre imágenes de la revolución -de cualquier revolución- y lo que va fraguando la guerra fría; es también una sucesión de detenciones que trata lo exterior de las políticas, sus ideologías, lo más íntimo de las manifestaciones vitales y sus encuentros. El tiempo (nuestro tiempo) y la noción de Tiempo, sus lógicas, envuelven lo accidental de estas manifestaciones, y su relatividad propone un acercamiento dialéctico que nos acerca al territorio ideal del Siglo XX, interrogando su finitud, sus victorias y sus fracasos.